Gato Manx

Origen: El verdadero origen de esta raza poco usual se pierde en cuentos y leyendas. La ausencia total de cola se atribuye a hechos tan insólitos como aquel que se refiere a Noé, quien al llegar el gato como último, le pilló el rabo con la puerta del Arca; también hay leyendas que cuentan que las gatas madres cortaban deliberadamente los rabos de sus hijos para evitarles el sufrimiento de caer en manos de tropas invasoras, que colgaban las colas en sus escudos.
A veces se dice que los fenicios, mercaderes navegantes de la antigüedad, han introducido la raza desde el Lejano Oriente hasta la isla de Man, en el Mar de Irlanda. Si esto fuera verdad, el manx seria una mutación o adaptación de algo similar al bobtail japonés.
Más probable parece el origen del manx a bordo de los galeones de la armada española. Algunos gatos sin rabo (siempre había gatos a bordo para controlar las ratas), resultado de mutaciones, llegaron a la costa al hundirse algunas naves españolas cerca de la isla de Man a finales del siglo XVI. Aislado de otras razas en la isla, su cualidad de falta de rabo fue transmitida a las nuevas generaciones. Más tarde, los criadores tomaron estos ejemplares como base, d
esarrollando la raza, cruzando cuidadosamente con ejemplares de rabo completo.
Descripcion: El manx tiene buen carácter, es afectuoso e inteligente. Es amable con todo el que venga a casa, y es en casa donde le gusta pasar la mayor parte de su tiempo. A pesar de ser tan hogareño, es una raza muy activa, que le encanta hacer cualquier actividad, y es un gran cazador con mucho reflejo. Necesita el juego como rutina diaria

0 comentarios:

Publicar un comentario